Felicitaciones. Tienes lo que llamamos un buen problema: dos ofertas de trabajo.  Todo depende de qué es lo que buscas y cuál de las dos encaja más con tus objetivos profesionales.

¿Se ve mal en el CV cambiar de una empresa grande a una más chica? No hay problema mientras tengas un sustento sólido.

El ojo experimentado captará que se trata de una empresa de menor dimensión, quizá no tan conocida, pero se enfocará en qué has hecho en la posición, en tus logros principalmente, y se fijará en otros detalles, por ejemplo:

1. A quién le reportas en la nueva empresa. Si en la empresa más chica le reportas directamente al gerente general, es diferente que si en la más grande le reportabas al jefe del jefe.
2. Mirará tus responsabilidades. Se fijará en el alcance de la posición,  el presupuesto que manejas, tu responsabilidad sobre otros. Si en la empresa más grande no tenías reportes directos pero en la más chica supervisarás a cinco personas, se verá muy bien.
3. Analizará el cargo que asumas. Si en la empresa más grande eres líder de proyecto y en la otra serás jefe, entonces estarás creciendo profesionalmente.

Hay muchos factores a considerar. Eres joven y estás en una etapa de tu carrera en la que aún tienes mucho que aprender y aportar. Pregúntate si quieres “hacer más de lo mismo”, por más que te paguen más en una empresa grande. Si ese es el caso, aliviará la inquietud que te motivó a buscar y si es al contrario, terminarás insatisfecho en unos meses.

En términos generales, la ventaja de trabajar en una empresa grande está en que hay muchas cosas que están relativamente armadas: los procesos, las mejores prácticas, las métricas, etc. Suelen ser buenas empresas formadoras y puedes desarrollar experiencia técnica. Además, el ‘halo’ de saber o decir que trabajas en una empresa grande, suele satisfacer el ego de muchos. Pregúntate si eres uno de ellos. Si eres más bien estructurado, ordenado, y prefieres cierto respaldo y seguridad, probablemente te inclinarás hacia la oferta de la empresa más grande.

Por otro lado, si ya has pasado por la experiencia de trabajar en una empresa grande, trabajar en una más chica puede resultar desafiante. Pero ésta suele ser más ágil y puedes ganar mucho con la experiencia.  Quizá tengas menos recursos y tendrás que ponerte varios sombreros porque siempre faltarán manos. Es una excelente oportunidad para quienes les gustan los desafíos, aprender de cero y de otras áreas más directamente. Desarrollarás una visión más amplia del negocio y aprenderás de los que toman las decisiones al estar más cerca de ellos.  Si eres una persona de desafíos, quieres aprender más sobre otras áreas del negocio rápidamente y si te gustan los cambios continuos, puede resultar una opción válida.

Para concluir, dale una mirada a la entrevista con la experta en desarrollo profesional, Kimberly Schneidermanes, en la que compara los pros y contras de trabajar en una empresa grande vs. una más chica. Se centra en tres diferencias fundamentales: 1) cómo se venden las ideas, 2) las oportunidades de carrera y 3) la cultura corporativa.

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Fuente: www.idyllicsoftware.com