12 Apodos que debes evitar en el trabajo
Me he enterado que tengo una “chapa” en el trabajo. Me dicen que soy un “dedo” pero lo cierto es que si no estoy encima de la gente todo se atrasa y no consigo los objetivos. ¿Debo preocuparme?
Las “chapas” o apodos en el trabajo, suelen responder a actitudes o comportamientos de los cuales nos adueñamos al repetirlos en exceso, muchas veces sin estar consciente de ello. El problema es que una vez puesta la “chapa”, es difícil desecharla.
Como regla general de marketing personal, siempre querrás que te asocien con cosas positivas en el trabajo. Evita caer en comportamientos indeseados que se terminan convirtiendo en tu marca personal. Estos son algunos de los sobrenombres más comunes en toda oficina, a los cuales debes estar atento.
1. El Chismoso. Siempre listo y atento a compartir novedades de otros, menos las propias.
2. El Llorón. Es una víctima, la culpa es siempre de otros. Siente que es quien más trabajo tiene, menos recursos, menos tiempo y siempre habla de ello.
3. El Sobón. Siempre está alerta a las necesidades del jefe lo cual es bueno, la diferencia es que se desvive para satisfacerlas.
4. El Descuidado. Suele ser despreocupado con su aseo personal y nadie sabe cómo decirle que se cepille los dientes, lave el pelo, cambie de ropa o limpie los lentes, entre otros.
5. El “Hay-que”. Siempre tiene ideas y críticas, pero nunca toma la posta o se ofrece a ejecutarlas.
6. El Jalisco. Siempre tiene la razón, no da su brazo a torcer y refuta hasta la última instancia.
7. El Dilatador. No toma decisiones, pide la opinión de todos, y termina sus reuniones sugiriendo “verlo después”.
8. El Nerviosito. Es lo opuesto del dilatador. No se detiene, siempre está en todas, listo para tomar acción.
9. El Flojo. Deja todo para última hora y espera que el resto deje lo que está haciendo para sacarlo de apuros.
10. El Maldito. Le tienen terror. Consigue resultados pero trata mal a la gente, muchas veces sin darse cuenta.
11. El Negativo. Le cuesta ver el lado positivo de las cosas, siempre encuentra algo que objetar en las propuestas de otros, asumiendo un rol crítico y rara vez constructivo.
12. El Sabelotodo. Se siente obligado a participar en toda discusión o intercambio, siempre tiene una respuesta para todo y pareciera querer impresionar a otros con sus conocimientos.
¿Quién no ha incurrido en algunos estos comportamientos en el trabajo? Somos seres humanos, después de todo, pero reflexiona: ¿Se trata de comportamientos recurrentes en ti? ¿Te identificas con algunos de los apodos?
Entonces deja el comportamiento indeseado. Puedes inspirarte en el gurú del coaching ejecutivo, Marshall Goldsmith, quien sugiere soluciones sencillas a los “20 malos hábitos” que identificó en los más exitosos, en su best-seller “What Got you Here Won´t get you There”. A continuación, un video resumen.
Para empezar a corregir, hay que estar consciente de los comportamientos que podrían estar jugando en contra. Puedes pedir retroalimentación honesta de quienes te rodean, o el feedforward, que sugiere Goldsmith en el video. No olvides preguntar a miembros de tu familia, ya que los comportamientos en el trabajo suelen también reflejarse en casa.
Puedes también plantear las tres preguntas de oro que debe hacer todo profesional (a otros), e irás por buen camino:
¿Qué debo empezar a hacer?
¿Qué debo dejar de hacer?
¿Que debo seguir haciendo?
Suerte.
Google images: www.sheknows.com, www.professionalintern.com, www.smh.com.au
Artículo originalmente publicado en www.semanaeconomica.com / 06 de Noviembre 2014